Tras anunciar en 2009 la disolución de la banda en la recta final de 2011, su líder Rolf Kasparek comunicaba el regreso del grupo para este año 2012 que se ha visto ya refrendado con la edición de nuevo Lp. " Shadowmaker”, valoración que ya te ofrecimos en la edición nº119 de FORCE Magazine.Con ello hablamos con su líder, del porque de la disolución, que según nos cuenta ya lo tenía pensado desde tres años años, del porque del regreso, del nuevo disco y mas cosas de la carrera de la banda germana. Al otro lado de teléfono, Rolf Kasparek.
Decidiste disolver Running Wild en 2009, ¿por qué decides volver a la música?
A decir verdad, cuando decidí poner fin a Running Wild con el concierto de Wacken en 2009, hacía mucho tiempo que yo ya lo había dado por terminado. Pretendíamos volver a grabar el material que compone los primeros nueve discos de la banda, ya que ya no se publica y estaba como perdido. Es un material que se encuentra descatalogado. Por este motivo, me puse en contacto con Universal Records, teniendo en cuenta que la compañía es la propietaria del material, y expuse mi intención de publicar dos paquetes, compuestos por dos CDs y unas veinte canciones cada uno. A la compañía le pareció bien, pero me indicaron que era necesario incluir cierto material extra. El problema era que yo no disponía de temas inéditos, así que tuve que ponerme a escribir material nuevo. Cuando estaba escribiendo los temas nuevos, me di cuenta de que eran demasiado buenos como para utilizarlos únicamente como bonus tracks; así que se me ocurrió la posibilidad de hacer un nuevo disco, ya que usarlos de otro modo para mí no tenía ningún sentido. Finalmente, firmé un contrato con SPV y por eso estamos aquí hoy hablando de la publicación de un nuevo disco. Es cierto que dejé Running Wild, pero me he dado cuenta de que debo continuar. De hecho, lo dejé porque sentía un vacío y me resultó especialmente difícil la preparación del material que conformaría el último disco de la banda. Hoy la situación es totalmente distinta porque he vuelto a disfrutar preparando el nuevo trabajo. *¿Crees que dar por finalizada la carrera de Running Wild con la edición de ese disco en directo llamado The Final Jolly Roger fue un buen final para el grupo?
Habían pasado unos seis meses desde que tuvo lugar el concierto de Wacken cuando supimos que todo el material que habíamos grabado en directo aquel día se había perdido. Sólo disponíamos de un par de temas con sonido estéreo, en los que no podíamos hacer ninguna modificación con respecto a la batería, las voces… Únicamente existía la posibilidad de trabajar con el sonido hasta conseguir que éste fuera lo más apto posible para su inclusión en un disco. Nos pareció bien publicarlo, pero no es que piense que se tratara del mejor DVD de todos los tiempos.
El nuevo Lp., Shadowmaker, incluye un tema llamado «Dracula», inspirado en el libro de Bram Stoker y en una de las películas interpretadas por Christopher Lee, ¿por qué elegiste precisamente este personaje?
Porque durante el último medio año he visto muchas viejas películas en las que aparece Christopher Lee en el papel de Dracula, y se me ocurrió hacer una canción sobre el tema. De hecho, se podría decir que es una canción épica en conmemoración del papel de Dracula interpretado por Christopher Lee, cuya duración es de 7 minutos y medio aproximadamente
*¿Qué sensación te ha producido volver otra vez al estudio de grabación?
La verdad es que ha sido genial. Todas las canciones han salido de una forma muy natural. En el último disco todo era trabajo y ahora el trabajo se ha convertido en algo divertido. Todo es distinto y estoy contento de haber encontrado el sentimiento que debe recorrer cualquier tipo de proyecto. Estoy muy satisfecho.
Muchos han sido los músicos que han pasado por Running Wild, pero ¿hoy por hoy cuál es la formación del grupo?
Cuando estoy trabajando en el estudio no existe ninguna formación porque Running Wild es un proyecto en solitario y únicamente contrato músicos para realizar las funciones que yo no puedo desempeñar. Por lo que respecta a las actuaciones en directo, si las hubiera, contaría con total seguridad con los mismos músicos que tocaron en el concierto de Wacken.
Durante el periodo que transcurre entre tu decisión de dejar Running Wild en 2009 hasta el momento en el que decides volver, ¿has realizado alguna actividad relacionada con la música, aparte de la composición de estos temas?
Sí, he participado en un proyecto llamado Toxic Taste con algunos amigos, que también habían tocado en directo con Running Wild. Este proyecto me brindó la oportunidad de tener una visión del material que había hecho con Running Wild desde fuera. Necesitaba estar seguro de que era correcto acabar con el grupo. Toxic Taste me ayudó a volver a disfrutar de mi trabajo en Running Wild, así que se podría decir que este proyecto constituye una parte importante de lo que estoy haciendo ahora, y no me refiero a la vertiente musical. He aprendido mucho como músico, como compositor, como productor, como cantante, sobre mí mismo, y sobre lo que puedo y lo que no puedo hacer. Es una parte importante de lo que ha hecho posible la existencia de Shadowmaker.
*¿No tenías un proyecto junto al guitarrista Peter Jordan con Emi Electrola?
Sí, es cierto. Es un proyecto paralelo llamado Giant X, que puedo compaginar con Running Wild. Quizá saquemos algún disco, pero no puedo deciros ni cuándo, ni dónde, ni con qué compañía discográfica; lo que sí es cierto es que eso es algo que nos gustaría hacer porque se trata de un muy buen proyecto de hard rock y heavy metal; muy distinto, musicalmente hablando, de Running Wild.
Shadowmaker, ¿a qué disco de los publicados por Running Wild hasta ahora se acerca más según tu opinión?
Esa es una pregunta difícil de contestar porque este álbum está compuesto por diez canciones muy distintas unas de otras: hay temas melódicos, canciones duras, canciones con un sonido más heavy… En él hay temas que bien podrían haber formado parte del álbum Pile of Skulls o de Masquerade, pero hay otros que podrían haberse incluido en Blazon Stone. Hay incluso una canción cuyos riffs, y no tanto la línea vocal, hacen que pudiera haber sido ideal para su inclusión en un disco como Gates to Purgatory.
Hay una frase en tu página web en la que dices que no vives el pasado, sino que vives el presente y el futuro, ¿cuál ha sido para ti el mejor momento de Running Wild?
Es difícil de decir porque el momento actual es genial por el hecho de regresar con un material que me gusta de verdad y por cómo me siento ahora mismo. Sin embargo, he de admitir que momentos especialmente buenos son los que se refieren a algunas actuaciones en directo. A veces estás en el escenario y desde el primer tema sabes que estás viviendo un momento mágico, aun cuando la actuación del día anterior no fuera tan buena y la del día siguiente tampoco sea capaz de superar a la de hoy. Por ejemplo, el concierto de Wacken en 2009 fue muy emotivo. Fue muy especial ver a todas esas personas gritando y cantando las canciones mientras aguantaban bajo la lluvia y soportaban el frío.
Suponemos que dos de los peores momentos fueron, por un lado, la comunicación de la disolución de la banda en 2009 y, por otro, aunque nos mencionabas que fue emotivo, esa última actuación en el festival de Wacken, ¿cómo te sentiste cuando estabas escribiendo el comunicado y cómo te sentiste sabiendo que aquel era el último concierto?
Por lo que respecta al concierto, algunas personas me preguntaron si estaba triste, y mi respuesta siempre era negativa porque para mí Running Wild ya había terminado en el año 2006. No me desperté un día y decidí que ya no quería hacerlo más, sino que fue más bien un proceso. Con cada día que pasaba estaba más convencido de que tenía que terminar con esa etapa. Para mí, Wacken no fue la última actuación de Running Wild porque ya me había despedido de la banda tres o cuatro años antes, sino que fue un muy buen concierto dedicado a los fans.
Tú estás a cargo de todo lo que lleva aparejado el nombre de Running Wild, pero ¿echas en falta tener a alguien al lado que te asesore, que a veces tenga diferencias musicales contigo, alguien con quien discutir?
No, porque en Running Wild verdaderamente participan muchas personas. Estoy solo y se trata de un proyecto en solitario en el sentido estricto del término cuando compongo los temas, pero en lo relativo a la elaboración del disco, a la grabación, etc., existen otras personas implicadas. En este disco, por ejemplo, he contado con otro productor, que lo que hace es aportar sus conocimientos y su saber hacer al trabajo, aunque no esté produciendo. Para serte sincero, no me siento solo en absoluto.
¿Cuál sería el proyecto que te gustaría hacer como músico?
Hasta ahora he participado en Toxic Taste, que ha resultado ser algo francamente divertido. No ha tenido éxito comercialmente hablando, pero ha sido una gran experiencia. Además de eso, he participado en el proyecto Giant X, junto a Peter Jordan, y ha sido algo fantástico. No descarto participar en algún otro proyecto en el futuro si realmente me interesa en el sentido de hacerme sentir bien, pero Running Wild es hoy por hoy mi prioridad.
Hubo una trilogía que englobaba los discos Victory, Masquerade y Rivalry, ¿tienes en mente hacer algo parecido próximamente?
No puedo daros ninguna información al respecto porque no lo sé. Ahora mismo sólo pienso en el nuevo disco, Shadowmaker. Ni siquiera sé si vamos a tocar en directo con este nuevo trabajo porque todavía no lo hemos hablado. Primero queremos ver como funciona y ya veremos qué viene después. Todo esto es relativamente nuevo para mí. Si me hubieras preguntado hace seis meses si sacaría algún otro disco de Running Wild, hubiera dicho que no. Todo ha pasado de una manera muy rápida y, la verdad, es que estoy muy contento.
Sabemos que existen un par de discos tributo realizados por diferentes bandas. Existe, asimismo, una banda tributo a Running Wild llamada Metal Pirates, ¿qué supone para un músico que haya grupos que versionen sus canciones y que haya una banda que lo haga además en directo?
Hace que me sienta muy orgulloso y demuestra que Running Wild es algo muy especial porque tiene muchísimos seguidores ahí fuera a los que verdaderamente les gusta la banda. La verdad es que disfruto mucho con ese tipo de cosas.
¿Qué recuerdos tienes de un grupo que se llamaba Granite Heart?
Era Running Wild, ya que se trataba de los mismos músicos. Empezamos allá por el 76 o el 77 y no era más que una banda compuesta por compañeros de clase que deseaban hacer música. Hubo un momento en que algunos de los miembros abandonaron el grupo y, creo que en el 79, otras dos personas pasaron a formar parte del mismo, por lo que decidimos cambiar el nombre de la banda; alguien, que no fui yo, sugirió que un buen nombre podría ser Running Wild y la mayoría estuvimos de acuerdo.
Hablábamos de finales de los 70, ¿crees que con las nuevas tecnologías las bandas actuales lo tienen más fácil o más difícil para editar discos?
Creo que en la actualidad es mucho más fácil hacer un disco gracias a los medios técnicos de los que se dispone. Antes, cuando nosotros empezamos, era necesario recurrir a otras personas que disponían de los medios propios de los estudios para poder hacerlo. Por otro lado, hoy es mucho más difícil que hace 10 años conseguir un contrato discográfico. Cuando Running Wild comenzaba su andadura, si conseguías un contrato adecuado, podías estar seguro de que llegarías a algún sitio. El contrato discográfico era una especie de meta, por así decirlo. Ahora mismo, tener un contrato discográfico no implica que vayas a vender discos, no te asegura una carrera como músico profesional, ni te garantiza que puedas llegar a vivir de la música. Creo que este último aspecto hace que la situación sea ahora mucho más complicada porque actualmente existen muchísimas bandas que hacen música por su cuenta.
¿Qué nos puedes anticipar de una biografía llamada Death and Glory, que no será publicada antes de 2013? ¿Cuál es su contenido?
No tengo ninguna información sobre el contenido del libro. La verdad es que aún no lo he leído. Sé que hay otras dos personas que publicarán sendos libros sobre Running Wild. Personalmente, no dispongo del tiempo suficiente para escribir un libro de estas características yo mismo, y hacerlo implicaría restar tiempo a mi actividad musical. Lo sí que os puedo decir es que me gustaría mucho leerlo porque a veces hay cosas en una obra con las que uno puede no estar de acuerdo. Creo que sería mucho mejor, pensando en los fans, si las personas sobre las que trata un libro lo leyeran y tuvieran la oportunidad de valorar si lo que se cuenta es cierto o no, de dar su punto de vista sobre ciertos hechos.
¿Cuáles son tus planes para los próximos meses?
Una vez que ya esta editado el disco, lo que ocurra a partir de ese momento, sobre todo en lo que se refiere a posibles conciertos, no es un tema que se deba tratar en esta conversación, ya que es algo que decidiremos cuando llegue el momento. Lo importante ahora es la publicación del disco.
¿Te gustaría decir algo mas a nuestros lectores y a tus fans?
Me alegro mucho de haber vuelto y tengo muchas ganas de que todos los fans puedan escuchar este nuevo disco del que estoy tan orgulloso.
Muchas gracias y bienvenido de nuevo al mundo de la música.
A decir verdad, cuando decidí poner fin a Running Wild con el concierto de Wacken en 2009, hacía mucho tiempo que yo ya lo había dado por terminado. Pretendíamos volver a grabar el material que compone los primeros nueve discos de la banda, ya que ya no se publica y estaba como perdido. Es un material que se encuentra descatalogado. Por este motivo, me puse en contacto con Universal Records, teniendo en cuenta que la compañía es la propietaria del material, y expuse mi intención de publicar dos paquetes, compuestos por dos CDs y unas veinte canciones cada uno. A la compañía le pareció bien, pero me indicaron que era necesario incluir cierto material extra. El problema era que yo no disponía de temas inéditos, así que tuve que ponerme a escribir material nuevo. Cuando estaba escribiendo los temas nuevos, me di cuenta de que eran demasiado buenos como para utilizarlos únicamente como bonus tracks; así que se me ocurrió la posibilidad de hacer un nuevo disco, ya que usarlos de otro modo para mí no tenía ningún sentido. Finalmente, firmé un contrato con SPV y por eso estamos aquí hoy hablando de la publicación de un nuevo disco. Es cierto que dejé Running Wild, pero me he dado cuenta de que debo continuar. De hecho, lo dejé porque sentía un vacío y me resultó especialmente difícil la preparación del material que conformaría el último disco de la banda. Hoy la situación es totalmente distinta porque he vuelto a disfrutar preparando el nuevo trabajo. *¿Crees que dar por finalizada la carrera de Running Wild con la edición de ese disco en directo llamado The Final Jolly Roger fue un buen final para el grupo?
Habían pasado unos seis meses desde que tuvo lugar el concierto de Wacken cuando supimos que todo el material que habíamos grabado en directo aquel día se había perdido. Sólo disponíamos de un par de temas con sonido estéreo, en los que no podíamos hacer ninguna modificación con respecto a la batería, las voces… Únicamente existía la posibilidad de trabajar con el sonido hasta conseguir que éste fuera lo más apto posible para su inclusión en un disco. Nos pareció bien publicarlo, pero no es que piense que se tratara del mejor DVD de todos los tiempos.
El nuevo Lp., Shadowmaker, incluye un tema llamado «Dracula», inspirado en el libro de Bram Stoker y en una de las películas interpretadas por Christopher Lee, ¿por qué elegiste precisamente este personaje?
Porque durante el último medio año he visto muchas viejas películas en las que aparece Christopher Lee en el papel de Dracula, y se me ocurrió hacer una canción sobre el tema. De hecho, se podría decir que es una canción épica en conmemoración del papel de Dracula interpretado por Christopher Lee, cuya duración es de 7 minutos y medio aproximadamente
*¿Qué sensación te ha producido volver otra vez al estudio de grabación?
La verdad es que ha sido genial. Todas las canciones han salido de una forma muy natural. En el último disco todo era trabajo y ahora el trabajo se ha convertido en algo divertido. Todo es distinto y estoy contento de haber encontrado el sentimiento que debe recorrer cualquier tipo de proyecto. Estoy muy satisfecho.
Muchos han sido los músicos que han pasado por Running Wild, pero ¿hoy por hoy cuál es la formación del grupo?
Cuando estoy trabajando en el estudio no existe ninguna formación porque Running Wild es un proyecto en solitario y únicamente contrato músicos para realizar las funciones que yo no puedo desempeñar. Por lo que respecta a las actuaciones en directo, si las hubiera, contaría con total seguridad con los mismos músicos que tocaron en el concierto de Wacken.
Durante el periodo que transcurre entre tu decisión de dejar Running Wild en 2009 hasta el momento en el que decides volver, ¿has realizado alguna actividad relacionada con la música, aparte de la composición de estos temas?
Sí, he participado en un proyecto llamado Toxic Taste con algunos amigos, que también habían tocado en directo con Running Wild. Este proyecto me brindó la oportunidad de tener una visión del material que había hecho con Running Wild desde fuera. Necesitaba estar seguro de que era correcto acabar con el grupo. Toxic Taste me ayudó a volver a disfrutar de mi trabajo en Running Wild, así que se podría decir que este proyecto constituye una parte importante de lo que estoy haciendo ahora, y no me refiero a la vertiente musical. He aprendido mucho como músico, como compositor, como productor, como cantante, sobre mí mismo, y sobre lo que puedo y lo que no puedo hacer. Es una parte importante de lo que ha hecho posible la existencia de Shadowmaker.
*¿No tenías un proyecto junto al guitarrista Peter Jordan con Emi Electrola?
Sí, es cierto. Es un proyecto paralelo llamado Giant X, que puedo compaginar con Running Wild. Quizá saquemos algún disco, pero no puedo deciros ni cuándo, ni dónde, ni con qué compañía discográfica; lo que sí es cierto es que eso es algo que nos gustaría hacer porque se trata de un muy buen proyecto de hard rock y heavy metal; muy distinto, musicalmente hablando, de Running Wild.
Shadowmaker, ¿a qué disco de los publicados por Running Wild hasta ahora se acerca más según tu opinión?
Esa es una pregunta difícil de contestar porque este álbum está compuesto por diez canciones muy distintas unas de otras: hay temas melódicos, canciones duras, canciones con un sonido más heavy… En él hay temas que bien podrían haber formado parte del álbum Pile of Skulls o de Masquerade, pero hay otros que podrían haberse incluido en Blazon Stone. Hay incluso una canción cuyos riffs, y no tanto la línea vocal, hacen que pudiera haber sido ideal para su inclusión en un disco como Gates to Purgatory.
Hay una frase en tu página web en la que dices que no vives el pasado, sino que vives el presente y el futuro, ¿cuál ha sido para ti el mejor momento de Running Wild?
Es difícil de decir porque el momento actual es genial por el hecho de regresar con un material que me gusta de verdad y por cómo me siento ahora mismo. Sin embargo, he de admitir que momentos especialmente buenos son los que se refieren a algunas actuaciones en directo. A veces estás en el escenario y desde el primer tema sabes que estás viviendo un momento mágico, aun cuando la actuación del día anterior no fuera tan buena y la del día siguiente tampoco sea capaz de superar a la de hoy. Por ejemplo, el concierto de Wacken en 2009 fue muy emotivo. Fue muy especial ver a todas esas personas gritando y cantando las canciones mientras aguantaban bajo la lluvia y soportaban el frío.
Suponemos que dos de los peores momentos fueron, por un lado, la comunicación de la disolución de la banda en 2009 y, por otro, aunque nos mencionabas que fue emotivo, esa última actuación en el festival de Wacken, ¿cómo te sentiste cuando estabas escribiendo el comunicado y cómo te sentiste sabiendo que aquel era el último concierto?
Por lo que respecta al concierto, algunas personas me preguntaron si estaba triste, y mi respuesta siempre era negativa porque para mí Running Wild ya había terminado en el año 2006. No me desperté un día y decidí que ya no quería hacerlo más, sino que fue más bien un proceso. Con cada día que pasaba estaba más convencido de que tenía que terminar con esa etapa. Para mí, Wacken no fue la última actuación de Running Wild porque ya me había despedido de la banda tres o cuatro años antes, sino que fue un muy buen concierto dedicado a los fans.
Tú estás a cargo de todo lo que lleva aparejado el nombre de Running Wild, pero ¿echas en falta tener a alguien al lado que te asesore, que a veces tenga diferencias musicales contigo, alguien con quien discutir?
No, porque en Running Wild verdaderamente participan muchas personas. Estoy solo y se trata de un proyecto en solitario en el sentido estricto del término cuando compongo los temas, pero en lo relativo a la elaboración del disco, a la grabación, etc., existen otras personas implicadas. En este disco, por ejemplo, he contado con otro productor, que lo que hace es aportar sus conocimientos y su saber hacer al trabajo, aunque no esté produciendo. Para serte sincero, no me siento solo en absoluto.
¿Cuál sería el proyecto que te gustaría hacer como músico?
Hasta ahora he participado en Toxic Taste, que ha resultado ser algo francamente divertido. No ha tenido éxito comercialmente hablando, pero ha sido una gran experiencia. Además de eso, he participado en el proyecto Giant X, junto a Peter Jordan, y ha sido algo fantástico. No descarto participar en algún otro proyecto en el futuro si realmente me interesa en el sentido de hacerme sentir bien, pero Running Wild es hoy por hoy mi prioridad.
Hubo una trilogía que englobaba los discos Victory, Masquerade y Rivalry, ¿tienes en mente hacer algo parecido próximamente?
No puedo daros ninguna información al respecto porque no lo sé. Ahora mismo sólo pienso en el nuevo disco, Shadowmaker. Ni siquiera sé si vamos a tocar en directo con este nuevo trabajo porque todavía no lo hemos hablado. Primero queremos ver como funciona y ya veremos qué viene después. Todo esto es relativamente nuevo para mí. Si me hubieras preguntado hace seis meses si sacaría algún otro disco de Running Wild, hubiera dicho que no. Todo ha pasado de una manera muy rápida y, la verdad, es que estoy muy contento.
Sabemos que existen un par de discos tributo realizados por diferentes bandas. Existe, asimismo, una banda tributo a Running Wild llamada Metal Pirates, ¿qué supone para un músico que haya grupos que versionen sus canciones y que haya una banda que lo haga además en directo?
Hace que me sienta muy orgulloso y demuestra que Running Wild es algo muy especial porque tiene muchísimos seguidores ahí fuera a los que verdaderamente les gusta la banda. La verdad es que disfruto mucho con ese tipo de cosas.
¿Qué recuerdos tienes de un grupo que se llamaba Granite Heart?
Era Running Wild, ya que se trataba de los mismos músicos. Empezamos allá por el 76 o el 77 y no era más que una banda compuesta por compañeros de clase que deseaban hacer música. Hubo un momento en que algunos de los miembros abandonaron el grupo y, creo que en el 79, otras dos personas pasaron a formar parte del mismo, por lo que decidimos cambiar el nombre de la banda; alguien, que no fui yo, sugirió que un buen nombre podría ser Running Wild y la mayoría estuvimos de acuerdo.
Hablábamos de finales de los 70, ¿crees que con las nuevas tecnologías las bandas actuales lo tienen más fácil o más difícil para editar discos?
Creo que en la actualidad es mucho más fácil hacer un disco gracias a los medios técnicos de los que se dispone. Antes, cuando nosotros empezamos, era necesario recurrir a otras personas que disponían de los medios propios de los estudios para poder hacerlo. Por otro lado, hoy es mucho más difícil que hace 10 años conseguir un contrato discográfico. Cuando Running Wild comenzaba su andadura, si conseguías un contrato adecuado, podías estar seguro de que llegarías a algún sitio. El contrato discográfico era una especie de meta, por así decirlo. Ahora mismo, tener un contrato discográfico no implica que vayas a vender discos, no te asegura una carrera como músico profesional, ni te garantiza que puedas llegar a vivir de la música. Creo que este último aspecto hace que la situación sea ahora mucho más complicada porque actualmente existen muchísimas bandas que hacen música por su cuenta.
¿Qué nos puedes anticipar de una biografía llamada Death and Glory, que no será publicada antes de 2013? ¿Cuál es su contenido?
No tengo ninguna información sobre el contenido del libro. La verdad es que aún no lo he leído. Sé que hay otras dos personas que publicarán sendos libros sobre Running Wild. Personalmente, no dispongo del tiempo suficiente para escribir un libro de estas características yo mismo, y hacerlo implicaría restar tiempo a mi actividad musical. Lo sí que os puedo decir es que me gustaría mucho leerlo porque a veces hay cosas en una obra con las que uno puede no estar de acuerdo. Creo que sería mucho mejor, pensando en los fans, si las personas sobre las que trata un libro lo leyeran y tuvieran la oportunidad de valorar si lo que se cuenta es cierto o no, de dar su punto de vista sobre ciertos hechos.
¿Cuáles son tus planes para los próximos meses?
Una vez que ya esta editado el disco, lo que ocurra a partir de ese momento, sobre todo en lo que se refiere a posibles conciertos, no es un tema que se deba tratar en esta conversación, ya que es algo que decidiremos cuando llegue el momento. Lo importante ahora es la publicación del disco.
¿Te gustaría decir algo mas a nuestros lectores y a tus fans?
Me alegro mucho de haber vuelto y tengo muchas ganas de que todos los fans puedan escuchar este nuevo disco del que estoy tan orgulloso.
Muchas gracias y bienvenido de nuevo al mundo de la música.
Traducción: Yolanda Blázquez
FORCE Magazine